Si el diente es de leche
Por las características de esta dentición, cuando el niño sufre un traumatismo dental o un golpe en sus dientes lo normal es que nos encontremos con un desplazamiento hacia detrás, delante o hacia dentro del diente afectado debido a la luxación del mismo. Es menos frecuente que veamos fracturas de la zona coronaria.
Cuando tenemos un desplazamiento del diente de leche nunca intentaremos enderezar el diente, es importante que acudamos inmediatamente a tu clínica dental de referencia, donde confirmarán si ese desplazamiento está afectando al germen del diente definitivo que se encuentra debajo de ella, y en base a ello determinar el tratamiento.
Es importante que el odontólogo marque un buen protocolo de revisiones pues las lesiones que afectan a la pulpa o nervio, requieren ser controladas periódicamente para evitar infecciones y oscurecimiento de la pieza por necrosis pulpar.
Si el diente es definitivo
El tipo de lesión que nos vamos a encontrar en este caso, dependerá del grado de desarrollo de la pieza.
Es decir, cuando empezamos a ver la corona de un diente definitivo en boca durante su erupción, su raíz aún tardará varios años en estar completamente formada y esto hace que el diente definitivo se parezca más a un diente de leche.
Por eso, en un diente que no está totalmente formado las lesiones más comunes son aquellas que van a desplazarlo hacia dentro, hacia detrás o delante. Ya no tenemos gérmenes debajo de la pieza afectada por lo que es importante tratar cuanto antes el diente.
Si padres o familiares y la circunstancia de ansiedad del niño lo permiten, debemos mover con pequeña presión el diente afectado hasta llevarlo a su posición e inmediatamente acudir a nuestra clínica dental de referencia. En el caso de los dientes definitivos, el tiempo que transcurre desde que sucede el trauma hasta que el diente es tratado es primordial, por lo que se recomienda enérgicamente no demorar la visita al odontólogo.
Si el diente se sale por el golpe
Tranquilízate, pues las lesiones en boca son muy escandalosas. Mira si falta algún diente y de ser así búscalo por la zona. Puede haber sido tragado, de ser así al niño no le pasará nada, pero perderemos la opción de poder volver a colocarlo en boca.
Llama por teléfono en el lugar del accidente a tu clínica dental de referencia para informarla y para que nos marque las pautas a seguir.
Si lo encontramos, solo se tocará el diente por la corona. Si está sucio ponlo bajo un suave chorro de agua o suero fisiológico para limpiar la suciedad y sin hacer presión, colócalo en el hueco que ha dejado. A continuación pide al niño que muerda muy suave una gasa o algodón y acude inmediatamente a tu clínica dental.
Si no estás seguro de colocarlo o no es posible, introdúcelo en un medio adecuado como leche o dentro de la boca del niño, intentando tocarlo lo menos posible y acudiendo de manera urgente al dentista